En la entrada anterior ya te contaba que tuve la suerte de disfrutar este verano de un paseo por la costa del País Vasco.
No había estado antes por Esukadi y después de seis días muy bien aprovechados, tengo que decirte que me ha encantado 🙂
# Visita a Bilbao (Bilbo)
El viaje comenzó en Bilbao, capital de Bizkaia. Decidimos quedarnos allí tres días y medio para conocer y disfrutar de la ciudad. Los siguientes tres días continuamos el viaje por la costa vasca, visitando los pueblos hasta llegar a Donosti, con tiempo para acercarnos también a Hondarribia.
Bilbao es una ciudad que ha apostado por la modernidad y el diseño, con estilo pero sin perder su identidad y sus tradiciones. Es una ciudad fácil de visitar, amable con los foráneos y con ganas de sorprender. Te gustará mucho.
# Transporte y hotel
Llegamos al aeropuerto de Bilbao a primera hora de la tarde, con lo que teníamos todavía algunas horas para pasear por la ciudad.
Desde el aeropuerto al centro de Bilbao puedes coger sin problema, el autobús. La línea de autobús A3247, operada por la compañía Bizkaibus, te lleva hasta la ciudad en aproximadamente 20 minutos por tan solo 1,5 euros. Sale cada 30 minutos. Con cuatro paradas en el centro de Bilbao: Calle Gurtubay, Calle Gran Vía-Diego López de Haro, Plaza Federico Moyua y Alameda Recalde.
Si vas a utilizar transporte público te recomiendo sacar la tarjeta Barik. Puedes ahorrar hasta un 50% en el uso de cualquier transporte y está disponible en todas las estaciones de metro, tranvía y en la zona de llegadas del Aeropuerto. Nosotros no la utilizamos porque nos gusta caminar y solo cogimos el transporte en una ocasión puntual.
Siempre solemos elegir un hotel o apartamento lo más céntrico posible. Aunque suelen ser un poco más caros que en las afueras, nos gusta estar en el centro para tener al alcance los lugares que vamos a visitar.
La oferta de hospedaje en Bilbao es muy amplia, pero en verano es preferible reservar con tiempo ya que las fiestas son en el mes de agosto.
En esta ocasión hemos elegido el Sercotel Coliseo Bilbao, un hotel con una decoración elegante y vanguardista, habitaciones muy amplias, bien ubicado y muy buen precio teniendo en cuenta los servicios que oferta.
# Zona Gran Vía
La Gran Vía Don Diego López de Haro es el centro comercial y financiero de la ciudad. Se encuentra en el barrio del Ensanche que comprende el espacio que queda al otro lado del río, frente al Casco Viejo.
Hay un montón de tiendas, bares y restaurantes. Puedes visitar en la zona de Gran Vía:
- El Teatro Campos Elíseos, diseñado por el arquitecto local Alfredo Acebal en cooperación con el decorador francés Jean Batiste Darroguy. Destaca su fachada de estilo art nouveau.
- El centro cultural y deportivo Azkuna Zentroa, antiguo almacén de vinos rediseñado por el francés Philippe Starck. También llamado la Alhóndiga, es uno de los edificios más representativos de Bilbao. Solo se mantiene la fachada original de principios del siglo XIX. El interior está totalmente renovado y de acuerdo a la nueva y moderna Bilbao. Me impresionaron las 43 columnas del interior, cada una con diseño diferente, y la piscina con fondo de cristal que puedes ver desde la planta baja.
- El metro, diseñado por el arquitecto Sir Norman Foster. Los accesos al metro son muy fáciles de localizar ya que se trata de unas estructuras de cristal curvas, que los bilbaínos llaman “fosteritos”, en honor al arquitecto. Construido de hormigón, acero y cristal, de apariencia futurista, que sorprende teniendo en cuenta que data de 1988.
- Estación Abando, también conocida por Estación del Norte. Posee una fachada frontal de estilo clásico y destaca su inmensa vidriera interior que representa lugares famosos y escenas de la vida tradicional vasca. Está situada en la Plaza Circular, donde se unen la Gran Vía y la calle Hurtado de Amézaga.
Ya que nuestro hotel quedaba en esta zona, aprovechamos la primera tarde para visitar la Alhóndiga, el teatro Campos Elíseos y la Gran Vía.
Luego cenamos por la Calle Diputación (Diputazio Kalea), zona peatonal con una amplia oferta de bares y restaurantes y gran afluencia de turistas y bilbaínos.
Las siguientes noches solíamos salir por esta Calle de Diputación y alrededores, o por el Casco Viejo, porque encuentras fácilmente donde cenar. La oferta es tan amplia que te cuesta elegir. Nuestra máxima suele ser que el local esté lleno y si es por gente del lugar, mejor.

En una de las columnas de La Alhóndiga
# Zona Casco Viejo
Al día siguiente empezamos cruzando el puente del Arenal para dirigirnos al Casco Viejo de Bilbao. Las vistas sobre la ría con todos sus edificios mirando las aguas son preciosas.
El Casco Viejo es el barrio más antiguo y el primer núcleo, origen de Bilbao. Es visita obligada para ir de pintxos y tomar algo. También para callejear y admirar rincones con encanto y arquitectura tradicional.
En el casco Viejo puedes visitar:
- Las siete calles (Zazpi Kaleak) que formaban el pueblo medieval original, con decenas de rincones que fotografiar y zona de pintxos más popular.
- Los puentes del Arenal, la Merced y San Antón, desde los que admirar las vistas de la ría y la ciudad.
- Edificios emblemáticos como el Teatro Arriaga (el teatro más antiguo de Bilbao), la Biblioteca de Bidebarrieta, la Bolsa o la estación de Atxuri.
- Monumentos religiosos como la Catedral de Santiago y las iglesias de San Antón, San Nicolás y Santos Juanes.
- La Plaza Nueva, donde también puedes ir de pintxos y disfrutar de la cocina vasca. Los domingos se realiza un mercadillo de artesanos y bohemios. También puedes encontrar antigüedades y artículos de colección como sellos, monedas, cómics o cromos.
- El Museo Vasco, para conocer algo más sobre las tradiciones, cultura e historia de este país.
- El Mercado de la Ribera, que es el mayor mercado cubierto de Europa. Ya existía un mercado en ese lugar desde el siglo XVI. Ahora es un edificio art-deco construido en 1929 por el arquitecto Pedro Ispizua.
Decidimos empezar el recorrido paseando por la ribera de la ría hacia el mercado, pasando junto al puente de la Merced.
Desayunamos en una tasca de las que están bajo los soportales justo frente al Mercado de la Ribera, más barato que en el mismo mercado.
Siempre que visitamos una ciudad nos gusta acercarnos a los mercados. Me encanta ver los puestos, los ingredientes del lugar y sus gentes. El Mercado de la Ribera es un espacio amplio y muy luminoso con preciosas vidrieras, que ha perdido un poco el sabor de los mercados tradicionales.
Llegamos hasta el Puente y la Iglesia de San Antón, donde estuvo el primer puerto de mercancías de la ciudad. Desde allí paseamos por las siete calles, atravesando el casco viejo hasta llegar a la Plaza Nueva, con tranquilidad y disfrutando.

Edificios junto a la ría desde el puente del Arenal

Teatro Arenal

Puente de La Merced

Rincón en la Plaza Nueva
# Zona Guggenheim
A continuación seguimos caminando por la ribera de la ría pasando por delante del Ayuntamiento y su puente, hasta llegar al puente Zubizuri (puente blanco), donde admiramos su fantástica estructura 🙂
Desde allí nos acercamos a la Plaza del Finucular para subir al mirador de la Artxanda donde nos cansamos a hacer fotos.
Al bajar pudimos comer un cóctel de frutas que compramos en una frutería que está en la misma plaza. Muy refrescante con el calor que hacía.
Todavía en la mañana, nos dio tiempo de seguir por la ribera hasta el Museo Guggenheim, una de las mejores experiencias de nuestra visita a Bilbao. Mi hija y yo terminamos enamoradas de Puppy.
Después de comer por la zona, nos dio tiempo de hacer una visita rápida al Museo de Bellas Artes, aunque ya estábamos bastante cansados. Me queda pendiente volver en mi siguiente visita a Bilbao.
La zona del Guggenheim te ofrece tiendas de diseñadores de moda además de gran cantidad de galerías y salas de exposiciones, librerías de arte, productos de regalo y antigüedades.
Puedes llegar como nosotros, desde el Casco Viejo en un agradable paseo por la ribera de la ría o en el metro (parada Moyua), o en el tranvía (parada Guggenheim).
No dejes de visitar en esta zona:
- El Ayuntamiento y su puente, proyecto de Joaquín Rucoba, el mismo arquitecto que también diseñó el Teatro Arriaga y la Alhóndiga.
- El puente Zubizuri, diseñado por Calatrava, de color blanco y con el suelo de cristal, que tiene una forma curva especial.
- El mirador de Artxanda, que ofrece unas de las mejores vistas de Bilbao. Desde allí, puedes ver el Casco Viejo, el Ensanche, el Museo Guggenheim, la Torre Iberdrola, las colinas que rodean el centro de la ciudad y más lejos el mar. Una forma fácil de llegar es en el funicular que sale de la Plaza del Funicular (entre las calles Castaños y Múgica y Butrón), frente al puente Zubizuri. Un viaje solo cuesta 1 €. Hay un funicular aproximadamente, cada 15 minutos.
- El puente de La Salve, una entrada a Bilbao que se funde con el Museo Guggenheim.
- El Museo Guggenheim, para mí la principal atracción de la ciudad. Diseñado por el arquitecto Frank Gehry, su visita es toda una experiencia. Solo admirar su arquitectura y exposición exterior, ya merece la pena. Destacamos la escultura en forma de perro Puppy del artista Jeff Koons, recubierta enteramente con flores frescas.
- El Museo de Bellas Artes de Bilbao, uno de los museos más importantes de España. Alberga una colección de más de 10.000 obras de arte españolas, belgas, italianas, holandesas y vascas, desde el siglo XIII hasta la actualidad. Se encuentra en una esquina del Parque de Doña Casilda, después de cruzar la plaza Euskadi frente al Guggenheim.

Puente Zubizuri

Vista de Bilbao desde el mirador de Artxanda

Puppy de Jeff Koons en el exterior del Guggenheim

Selfie con Puppy

Maman de Louise Bourgeois en el exterior del Guggenheim

El gran árbol y el ojo de Anish Kapoor en el exterior del Guggenheim
# Zona Euskalduna
En este lugar se encontraba el famoso Astillero Eukalduna y muy cerca está el estadio San Mamés si eres aficionada al fútbol
También puedes visitar en esta zona:
- El parque de Doña Casilda, amplia zona verde de la ciudad junto el parque República de Abando.
- El Palacio Euskalduna, diseñado por los arquitectos Federico Soriano y Dolores Palacios. El edificio recuerda a un barco y en él se encuentra un auditorio con capacidad para 2.000 personas. En el último piso está el restaurante Etxanobe, galardonado con una estrella michelín.
- El Museo Marítimo, situado en lo que fueron las dependencias de los astilleros Euskalduna. Recoge la historia, cultura e identidad de los hombres y mujeres que han vivido en y de la Ría de Bilbao.
Dejamos esta zona para el último día. Primero fuimos a visitar el mercadillo de los domingos de la Plaza Nueva y pudimos adquirir algunas curiosidades y regalos para llevar.
Luego nos trasladamos en metro hasta Euskalduna, porque nos quedaba un poco más lejos y aprovechamos así a admirar sus instalaciones.
Nos acercamos al Estadio San Mamés, aunque no somos muy futboleros. Y luego bajamos dando un paseo hasta el Parque de Doña Casilda donde descansamos del calor que hacía ese día.
Pasamos por el Palacio Euskalduna, pero no hicimos la visita porque preferimos ir al Museo Marítimo. Como en esta ocasión viajamos con nuestra hija de 10 años, nos pareció más divertido para ella y acertamos de verdad. El Museo Marítimo es una visita obligada si vas con niños.
A la vuelta cogimos el tranvía que recorre toda la ribera de la ría. Es una buena opción.
# Mis recomendaciones para dónde comer.

Pintxos y txacoli en La Viña del Ensanche
Comer y beber en Bilbao, aunque es un poco caro, es un regalo para los sentidos. Y como te comentaba antes, la oferta es tan variada que tienes para elegir.
La afición principal a la hora de comer, es ir de pintxos y nosotros lo hicimos todos los días 😉 Los establecimientos te ofrecen sobre la barra, una amplia, deliciosa y creativa variedad de pinchos que puedes acompañar con una copa. No dejes de degustar el txakoli blanco, vino ligeramente afrutado de la región.
Te señalo los restaurantes y bares en los que nosotros estuvimos y que te recomiendo porque nos fue muy bien:
- Gure-Toki, taberna familiar con raciones y pintxos creativos de raíz tradicional vasca, vinos, barra y terraza. En la Plaza Nueva, 12
- La Viña del Ensanche, restaurante familiar con mucha historia, con excelente variedad de pintxos y menú degustación. En Calle Diputación, 10
- Farqueta 56, una cocina de sabores tradicionales con estupendo servicio. En Calle Rodríguez Arias, 56
- Tostadero Nosi-Bé, centenaria heladería con una variedad de helados de sabores que ni imaginas. También helados sin azúcar y sin leche. En Calle Navarra,1
Hasta aquí nuestra visita a Bilbao. Puedes ver más fotos en mi cuenta de Instagram. En próximas entradas te contaré mi experiencia por los pueblos de la costa vasca y la visita a Donosti.
Espero te haya ayudado esta crónica si estás pensado hacer un viaje por Bilbao. No dudes en preguntarme si quieres conocer algo más. ¿Ya has estado por el País Vasco? ¿Qué te pareció y qué destacarías? Deja tus comentarios y así podrás enriquecer esta entrada.
La mayor parte de la información para preparar este viaje la he sacado de EuskoGuide, Guía de viaje del País Vasco.
Muy buena tu entrada sobre Bilbao, sabes lo que me gusta el País Vasco, todas las veces que he estado he descubierto algo nuevo. Creo es un lugar donde comer muy bien, disfutar de sus paisajes playas y gentes.
Para tu próxima visita te recomiendo ir a Mundaka una playa- paraíso… Impresionante playa de verdad.
Y por supuesto si tienes oportunidad de comer en uno de mis restaurantes favoritos en la península, «el Farketa Ache» allí siempre pido las anchoas frescas, sin palabras!
Besos
Muchas Gracias Yamil por tus aportaciones para visitar. Me las apunto para mi próxima visita, sobre todo la playa de Mundaka 🙂
Muchos besos